...pero, hágalo después de leer y a ver, si coincidimos en todos o ciertos puntos.
Hoy muchos desde diferentes rincones de nuestro maltratado planeta, asistimos a la primera conferencia abierta de Progressive International, ésa estuvo dirigida por Renata Ávila y los panelistas Katrin Jakobsdottir, Vanessa Nakate, Nanjala Nyabola, y Yanis Varoufakis.
Desde distinta perspectiva, donde cada uno de ellos se desarrolla, hemos podido oír su testimonio e ideas; desde la base en contacto directo con las personas, en la voz de dos activistas africanas, junto a ellas, una primer ministro y la de un ex ministro de economía.
Mis conclusiones a la lectura del pasar a un costado, las conversación e intercambio en vivo, entre los diferentes miembros asistentes, (Live chat) también me gustaría, de alguna manera, tocarlas.
Muchos coinciden en la necesidad de la traducción a diferentes idiomas; el usado fue el inglés. Totalmente de acuerdo y necesario. Si buscamos unidad, tenemos que tener una vía para entendernos y comprender lo que otro nos quiere comunicar. Creo que ese es un asunto solucionable en el tiempo y al amparo de la experiencia. No me cabe la menor duda, que con el apoyo de muchos miembros, será pronto una tarea cumplida.
Interesante es oír a una primer ministro y su enfoque a más alto nivel, como así mismo, a un economista y ambos con base humanitaria.
Mi mayor detención la quiero hacer, en esas dos mujeres activistas y su experiencia contada. No tengo ninguna intención en relatárselas, pero si tomar sus palabras y no dejarlas en el vacío para todos nosotros:
Muchos miran con escepticismo este asunto de una union internacional y con millones de preguntas, desde ¿cómo lograrlo? ¿Quiénes están a cargo? ¿Seremos los seguidores de otro orden, cuando ya estamos cansados de ellos? ¿Una nueva colonia ahora comenzando por el idioma? Nuestros países, ciudades, pueblos están tan lejos de lo que parece el centro, que, ¿podrán llegar hasta nosotros? ¿Otro socialismo, comunismo?
Mi respuesta a esto, es una opinión y visión muy personal, y es que, cada uno de nosotros estamos llamados a convertirnos en un activista de base y en un miembro de base.
¿Cuál es nuestra ventana para mirar el mañana con optimismo?
Union, fuerza de base, mercado consumidor. Si limitamos nuestro consumo a lo necesario, si compartimos lo nuestro con los más desposeídos, si eliminamos esa "necesidad" compulsiva de lo moderno, estaremos dando el primer paso en acercarnos a mirar adelante.
¿Qué puedo compartir cuando hasta lo mío es poco?
En mi experiencia, comparto entregando cultura, mi negocio está en la venta de mis noveles y he comprendido, que no todos pueden o tendrán acceso a ellas, por muy módico que haya sido su valor.
Cuido de la basura, mucha de ella termina en la tierra de mi jardín, produciendo más tierra orgánica.
Cuido con alimentación mi organismo, el no tener necesidad en el uso de atención médica y de paso, apoyo al productor local, ese mismo que los consorcios intentan liquidar.
Si usted es biólogo-agrónomo, y esto es sólo un ejemplo; piense en su condición de científico y deje de experimentar con semillas que a usted le aporta descubrimiento; al agricultor, pobreza, al verse obligado a la compra de ellas todos los años porque le es imposible reproducirlas desde su actual cosecha. Al consumidor, alergias y otros cambios físicos, porque usted como científico no tuvo el tiempo de experimentación para establecer todos los posibles efectos. ¿Eso, no está más alejado del concepto de ciencia?
Si deseamos cambios positivos para el futuro, esos sólo llegarán de nuestra mano, y no nos serán impuestos por Internacionales o organismos .ORG por el contrario, seremos nosotros los Internacionales y las org. Seremos las manos de nuestro destino y podremos descansar, pensando en que nuestro hijos, nuestros nietos y bisnietos y todos quienes lleguen, podrán vivir sin la aflicción de un virus, sin el temor a qué comeré mañana o si seguirá corriendo agua por los ríos. Que el único zoológico que los nuevos niños visiten, sea uno virtual y las especies sobrevivan en su entorno natural. No le podemos dejar la responsabilidad de arreglo a la naturaleza de todo lo que hemos destruido, eso significa nuestra extinción y de otros muchos junto a nosotros. Seguro es que ella podrá hacerlo, el desafío que les planteo, es no eludir nuestra responsabilidad cuando aun tenemos tiempo. ¡Sigo estando aquí y me niego a ser un espectador de cine!
Hoy muchos desde diferentes rincones de nuestro maltratado planeta, asistimos a la primera conferencia abierta de Progressive International, ésa estuvo dirigida por Renata Ávila y los panelistas Katrin Jakobsdottir, Vanessa Nakate, Nanjala Nyabola, y Yanis Varoufakis.Desde distinta perspectiva, donde cada uno de ellos se desarrolla, hemos podido oír su testimonio e ideas; desde la base en contacto directo con las personas, en la voz de dos activistas africanas, junto a ellas, una primer ministro y la de un ex ministro de economía.
Mis conclusiones a la lectura del pasar a un costado, las conversación e intercambio en vivo, entre los diferentes miembros asistentes, (Live chat) también me gustaría, de alguna manera, tocarlas.
Muchos coinciden en la necesidad de la traducción a diferentes idiomas; el usado fue el inglés. Totalmente de acuerdo y necesario. Si buscamos unidad, tenemos que tener una vía para entendernos y comprender lo que otro nos quiere comunicar. Creo que ese es un asunto solucionable en el tiempo y al amparo de la experiencia. No me cabe la menor duda, que con el apoyo de muchos miembros, será pronto una tarea cumplida.
Interesante es oír a una primer ministro y su enfoque a más alto nivel, como así mismo, a un economista y ambos con base humanitaria.
Mi mayor detención la quiero hacer, en esas dos mujeres activistas y su experiencia contada. No tengo ninguna intención en relatárselas, pero si tomar sus palabras y no dejarlas en el vacío para todos nosotros:
Muchos miran con escepticismo este asunto de una union internacional y con millones de preguntas, desde ¿cómo lograrlo? ¿Quiénes están a cargo? ¿Seremos los seguidores de otro orden, cuando ya estamos cansados de ellos? ¿Una nueva colonia ahora comenzando por el idioma? Nuestros países, ciudades, pueblos están tan lejos de lo que parece el centro, que, ¿podrán llegar hasta nosotros? ¿Otro socialismo, comunismo?
Mi respuesta a esto, es una opinión y visión muy personal, y es que, cada uno de nosotros estamos llamados a convertirnos en un activista de base y en un miembro de base.
- Como un activista: comunicando lo que hemos podido aprender, en favor y apoyo a nuestra comunidad. Educando en términos reales y en lenguaje sencillo, nuestra realidad de planeta, de sociedad. La oportunidad que nos ha sido dada, gracias a la educación recibida, debemos ser capaces de utilizarla en apoyar a otro que no tuvo nuestro acceso y que normalmente no está basado en capacidades intelectuales, simplemente una selección dentro de un sistema de capitales y consumo, de clases y raza predominante. Nuestra misión como activista, es precisamente activar el crecimiento en otro. Hacer a un lado el Selfie, a esa exaltación del ego a que lo los medios, en otro esfuerzo por alinearnos en una dirección, nos llevan acostumbrados.
- Como un miembro de base: vigilar nuestro actuar dentro del medio donde nos desenvolvemos, ser responsables en cada acto que realizamos, lo adquirido que tenga la razón de una necesidad, lo desechado que esté reducido al mínimo, el uso que esté regido por lo útil y no por lo nuevo. Que nuestro avance y paso a diario, esté resguardado por la mínima impresión de carbon que dejamos con nuestra huella.
- Un punto que dejé fuera, porque considero que cada uno ha de hacerlo a un lado. Nuestro equipaje político partidista, es sólo partirnos y lo hemos podido apreciar por décadas en ambas direcciones. Debemos ser tan grandes y aceptar nuestra humanidad al servicio de los seres en general, no de instituciones. Hablando de instituciones, un punto más candente, nuestra creencia religiosa; pienso que le fe es una cosa muy potente y mucho más fuerte cuando la conservamos en nuestro interior, será nuestro puntal en los momentos difíciles. Se debilita, cuando deseamos imponerla a otro. Ahí es cuando perdemos el sentido del amor.
¿Cuál es nuestra ventana para mirar el mañana con optimismo?
Union, fuerza de base, mercado consumidor. Si limitamos nuestro consumo a lo necesario, si compartimos lo nuestro con los más desposeídos, si eliminamos esa "necesidad" compulsiva de lo moderno, estaremos dando el primer paso en acercarnos a mirar adelante.
¿Qué puedo compartir cuando hasta lo mío es poco?
En mi experiencia, comparto entregando cultura, mi negocio está en la venta de mis noveles y he comprendido, que no todos pueden o tendrán acceso a ellas, por muy módico que haya sido su valor.
Cuido de la basura, mucha de ella termina en la tierra de mi jardín, produciendo más tierra orgánica.
Cuido con alimentación mi organismo, el no tener necesidad en el uso de atención médica y de paso, apoyo al productor local, ese mismo que los consorcios intentan liquidar.
Si usted es biólogo-agrónomo, y esto es sólo un ejemplo; piense en su condición de científico y deje de experimentar con semillas que a usted le aporta descubrimiento; al agricultor, pobreza, al verse obligado a la compra de ellas todos los años porque le es imposible reproducirlas desde su actual cosecha. Al consumidor, alergias y otros cambios físicos, porque usted como científico no tuvo el tiempo de experimentación para establecer todos los posibles efectos. ¿Eso, no está más alejado del concepto de ciencia?
Si deseamos cambios positivos para el futuro, esos sólo llegarán de nuestra mano, y no nos serán impuestos por Internacionales o organismos .ORG por el contrario, seremos nosotros los Internacionales y las org. Seremos las manos de nuestro destino y podremos descansar, pensando en que nuestro hijos, nuestros nietos y bisnietos y todos quienes lleguen, podrán vivir sin la aflicción de un virus, sin el temor a qué comeré mañana o si seguirá corriendo agua por los ríos. Que el único zoológico que los nuevos niños visiten, sea uno virtual y las especies sobrevivan en su entorno natural. No le podemos dejar la responsabilidad de arreglo a la naturaleza de todo lo que hemos destruido, eso significa nuestra extinción y de otros muchos junto a nosotros. Seguro es que ella podrá hacerlo, el desafío que les planteo, es no eludir nuestra responsabilidad cuando aun tenemos tiempo. ¡Sigo estando aquí y me niego a ser un espectador de cine!
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